Javier Toledo recordó la insólita y fuerte jugada de la que fue protagonista aquella noche en el Cementerio de los Elefantes y por la que debió abandonar la cancha a pocos minutos del cierre del partido. Más precisamente, el jugador sufrió un codazo malintencionado del defensor salteño y debió retirarse en ambulancia de la zona del estadio.

El delantero rojinegro habló con Sol Play este mediodía y se mostró muy enojado con el accionar del jugado Abello, de quién consideró que actúo con “mala leche” y que sin dudas “busco lesionar” al jugador. Con respecto a la fuerte entrada del defensor, Toledo afirmó que el jugador “cumplió con el pedido del entrenador” quién solicitaba que “vayan a romper todo a los jugadores”.

“Me están tratando con paciencia porque es una lesión brava, complicada”, detalló el delantero. “Me asusté al otro día cuando estaba más consciente. Después del golpe, cuando me caigo, me acuerdo hasta ahí, pasaron un par de minutos me dijo el doctor. Al otro día, ya en el sanatorio, veo la jugada y la verdad que la saqué barata. Uno ve el impacto y dónde fue, porque si son 5 cm, un poquito más arriba, me pega en la sien y pudo haber pasado cualquier otra cosa”.

Ante la pregunta sobre si hubo mala intención de parte de Daniel Abello, el defensor rival, aseguró que sí, y explicó: Ni siquiera tuvo un mensaje. Es un colega, un jugador, le pudo pasar a cualquiera, pero podes mandarme un mensaje, salió en todos lados que tuve fracturado, pérdida del conocimiento, internado. Mandame un mensaje, decime ‘che cómo estás, la verdad perdoname, fue una jugada desafortunada’. Yo lo tomé como que fue queriendo. Después de ver la jugada y que suceda esto después de varios días, todavía sin recibir un mensaje. Siento que me lo hizo a propósito”.

el delantero contó que escuchó polémicas indicaciones desde el banco de suplentes al mando de Rubén Forestello: “En el primer tiempo, cuando estábamos en el banco, escuchábamos desde el banco de ellos que el cuerpo técnico le gritaba a los defensores ‘dale dale, rompelo todo’, cuando estaba Axel en cancha y Axel sale lesionado también por una patada. Después hay una patada a Nacho (Lago) en mitad de cancha en el estómago. Son jugadas muy peligrosas y que los árbitros dejan pasar”

“Me sorprende de los mismos colegas que hagan caso. ‘Me está dando la orden de romperlo, voy y te doy una patada para romperte’. En mi caso me pegó un codazo de mala leche. Siento que me lo hizo de mala leche como pasó en todo el partido, con las patadas que pegaron” cerró el delantero.