Los efectivos patrullaban por calles Suipacha y Avenida Presidente Perón cuando fueron interceptados por una mujer con un niño desvanecido en sus brazos.
Una mujer de la fuerza santafesina y su ex pareja volvían de trabajar en Rosario y comenzaron una discusión. A ella la pasó a buscar su novio, quien también es policía, y en ese momento se produjo la pelea.
Desde el Gobierno de Santa Fe y el Ministerio Público de la Acusación dieron detalles de la investigación que culminó con la aprehensión de cinco efectivos policiales. “Se les va a imputar el encubrimiento de balaceras a objetivos importantes que tuvieron por objeto amenazar al gobernador y a distintos funcionarios provinciales”, se anticipó.
Las víctimas iban caminando por la calle y fueron obligadas a seguir transitando por el barro que había al costado del asfalto. Como se negaron, fueron atacadas.