En el salón de eventos Xanadú de La Ñata, en Tigre, había 16 cámaras de seguridad que serán claves para develar qué sucedió con Natacha Jaitt, la modelo de 42 años que falleció a la 1:49 de este sábado por un presunto “accidente cerebro vascular producido por la ingesta de alcohol y cocaína”.
En una de esas cámaras de seguridad, la policía pudo ver en una primera mirada un hecho que sorpendió: de las seis personas que estaban en el lugar, tres salieron corriendo cuando se enteraron la noticia de la muerte de la modelo.
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Natacha se habría retirado del salón y las imágenes la mostrarían yendo sola hacia una habitación. Minutos después, una persona habría abierto la puerta y la encontró sin vida semi tendida en la cama.
Las personas que huyeron fueron detenidas sobre las 9 de la mañana del sábado, horas después de haberse dado a la fuga.
La modelo había acudido al lugar junto a su amigo Raúl V. Duarte, un ciudadano paraguayo de 49 años, con el fin de mantener una reunión con el dueño del establecimiento, quien estaba interesado en contratarla para participar de distintos eventos. Ahora tendrán que investigar qué sucedió.
