La joven quedó con el 90% de su cuerpo lleno de quemaduras.

“Voy a contar acá breve qué me pasó así no le pasa a nadie más”, comenzó el duro relato de una joven usuaria de Twitter. “El miércoles voy a un lugar en Villa Pueyrredón, donde había un 2×1 en todas las camas y se las podía dar la misma persona o ir con un amigo”, continuó.

A aquel primer tuit, Paula (@ccolorito) le agregó una foto suya en donde se la ve internada, con un tono colorado en la piel y con algunas cremas sobre ella, comenzando a mostrar las consecuencias de la promoción en camas solares que había adquirido.

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“Ya había ido a cama solar y jamás me pasó esto. Llego y le digo al chico que las dos me las iba a dar yo, a lo cual me dice: ‘mira que vas a quedar bastante roja’. Y bue, estar un poco roja el jueves/viernes no era un problema. Me las di y al salir todo estaba genial”, siguió el relato de la chica.

Hasta que comenzó el mal momento: “El problema empezó a las dos horas, más o menos, en donde sí, me empecé a poner colorada, pero normal. A las 3 horas, tenía fiebre y temblaba como si hicieran 10 grados bajo cero. Me bajaba la presión, quería vomitar, no podía tomar líquido, ni comer”, relató.

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Debido a estas consecuencias, la usuaria @ccolorito terminó internada con una deshidratación grave por quemaduras, y explicó: “Lo cuento porque de verdad la estoy pasando muy mal. Es insoportable el dolor, tengo el 90% del cuerpo quemado en carne viva. No puedo dormir, ni sentarme, ni siquiera puedo parpadear porque me queme hasta los párpados, no puedo vestirme sola”.

Finalmente, Paula dejó una reflexión sobre estas acciones muy comunes en esta etapa moderna: “No vale la pena para nada someterse a esa pelotudez solo por un poco de color. Y si van, vayan a un lugar que SEPAN y les digan NO, no te lo hago porque sos muy blanca o porque te puede hacer mal. Habiendo ido un par de veces y salido todo bien, no lo volvería a hacer”.