Argentina es el bicampeón de América y se despide de Miami con la copa, una más del equipo de Lionel Scaloni, que consigue de esta manera dos Copas América, una Copa del Mundo y una Finalísima transformándose en el técnico más ganador de la historia del seleccionado argentino.
Este grupo, al mismo tiempo, es el más ganador de la historia del seleccionado argentino. Un equipo que tuvo que sufrir mucho porque en esta Copa no tuvo el nivel que le solemos conocer. No jugó como jugó en Qatar, por ejemplo, pero fue sorteando diferentes obstáculos. Fue presentándose de diferente manera, sufriendo incluso en algunos partidos como el de Ecuador, claramente donde Argentina sufrió y sufrió muchísimo para quedarse con con esa victoria. Esa victoria por penales que logró con una actuación maravillosa del Dibu Martínez.
Después subió en la presentación contra Canadá en las semifinales. Es verdad que Argentina le tocó un rival en la teoría un poco más accesible que a los demás, pero en la primera ronda había sufrido contra ese mismo rival y hoy le tocaba el plato más fuerte, el partido más complicado de todos los que tuvo que enfrentar en el certamen.
Y uno se preguntaba cómo jugaría Argentina frente a Colombia. Porque jugando como venía jugando y si Colombia mostraba el nivel que vino mostrando la historia podía ser un poco más compleja, bastante más compleja.
Argentina siempre estuvo a la altura del partido. Este campeón no es tan brillante como el de Qatar, pero fue un campeón que no se puede discutir porque en el partido más importante estuvo a la altura, porque lo sacó adelante con su jerarquía, porque logra un título fenomenal cuando del otro lado había un equipo que iba por todo, que iba por su victoria más grande, la más importante de su historia futbolística.
Para Argentina no digo que sea uno más porque este torneo lo hace bicampeón del continente. Este torneo lo hace pasar a Uruguay en la tabla de posiciones histórica de la Copa América y además tuvo una demostración por un grupo que un año y medio después sigue manteniendo el hambre, sigue manteniendo las ganas. Se sigue manteniendo el deseo porque son jugadores que ya están hechos desde todo punto de vista el deportivo, el de la gloria, el económico y sin embargo, quieren más y siempre quieren más.
Argentina ganó 1 a 0 con un golazo de Lautaro Martínez en el segundo tiempo extra y gritó campeón una vez más agigantando la figura de Lionel Messi, quien debió abandonar el campo por un golpe en su tobillo derecho.