Un nuevo y violento asalto sucedió en un comercio de San Jerónimo al 3700 en la noche del domingo. Un delincuente ingresó a la Panadería Santa Teresita y se llevó la recaudación del día.

El ladrón ingresó, amenazó a la empleada con un arma de fuego, y tomó lo que había en la caja registradora: dos mil pesos.

Afuera lo esperaba un motociclista para acelerar la huída, por lo que en segundos ya se habían alejado del lugar, según contó la periodista Verónica Encinas en LT10.

En el comercio creen que la situación los está obligando a pagar adicionales policiales para evitar más robos. Temen que alguno de esos delitos pueda terminar en tragedia, si algún ladrón dispara contra un empleado.