En la mañana de domingo, una mujer, mientras paseaba a su perro notó unas bolsas de consorcio sospechosas bajo una manta en la Plaza Escalante. De las mismas salía un fuerte olor nauseabundo y había muchas moscas presentes. La mujer movío el cobertor con un palo y vio lo que parecía una pierna humana.
Llamó a la policía, y estos siguieron revisando las bolsas y encontró más partes de un cuerpo, por lo que dieron intervención a la PDI y rasladaron las bolsas a la morgue.
La investigación llevó hasta una vivienda ubicada en calle 1 de mayo al 4.700, donde los vecinos aseguran haber sentido olor a carne quemada y desde el jueves no veían al dueño de un lavadero.
Además, en la madrugada del jueves, una vecina llamó a la policía porque escuchó a este hombre gritar que le dejaran de pegar.
Lo más nuevo en la investigación es que se constató que los restos encontrados son humanos y detuvieron a una mujer de 39 años que sería la pareja de este hombre, y que el domingo al mediodía había ido a la casa a llevarse muebles.
