Una niña de dos años ingresó al Hospital Protomédico, proveniente de Recreo con mordeduras de un perro en la zona del cuello y cabeza.

La menor, fue trasladada al hospital de Niños donde se le dieron las principales curaciones y se constató que tenía un colmillo del perro incrustado en el cráneo.

La madre de la niña relató que fueron a comer al mediodía a la casa de su suegro cuando un perro de color negro que estaba en la galería atado en una rueda de auto fue directo a la menor que estaba jugando y la agarra de la cabeza comenzando a sacudirla.

Los hombres intervienen y logran que el perro la suelte, resultado también herido su padre a quien el animal mordió en un tobillo y una mano.

Una vez en el hospital, la niña fue intervenida quirúrgicamente, y si bien hasta el momento se encuentra estable, fue dianosticada con fractura por mordedura de can en el parietal con hundimiento de cráneo, y quedó internada en cuidados intermedios.

La fiscal en turno dispuso que el dueño del animal sea identificado por lesiones culposas a determinar.