La primera fase de la Copa Argentina despertó algunos resquemores en Santa Fe: a Colón le tocó viajar 500 kilómetros, mientras que a su rival, Acassuso, anduvo menos de 50 kilómetros. En un torneo donde por lo general se beneficia al equipo de primera división, al rojinegro no le suele ir bien.
Porque el choque que tendrá frente a Sol de Mayo (que eliminó a Rosario Central, casualmente en el Brigadier López), podría disputarlo en Trelew. A 1.600 kilómetros de distancia. Toda una travesía.
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Otra vez, a Colón le tocaría ser el equipo perjudicado, ya que Sol de Mayo es de Viedma, a 490 kilómetros de Trelew.
Según el periodista Jorge Batagliotti, en Trelew ya lo dan como casi un hecho. “Una empresa de ciudad compró el partido a la Copa Argentina”, aseguró. Sería parte de una serie de eventos que el gobierno de Chubut patrocina y apoya.
El estadio de Racing de Trelew tiene capacidad para 13 mil espectadores y no posee luz artifical, por lo que el partido debería jugarse antes de las 16. Para los hinchas de Colón será muy difícil asistir: en avión habrá que desembolsar más de 10 mil pesos, haciendo una escala en Buenos Aires y en auto manejar más de 17 horas. Otra vez, el Sabalero sería muy perjudicado por la elección de la sede.
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