Un 4 de junio pero de 2021, Colón de Santa Fe escribió la página más gloriosa de su historia. En el estadio Bicentenario de San Juan, bajo la conducción de Eduardo Domínguez, el equipo rojinegro goleó a Racing Club 3 a 0 y se consagró campeón de la Copa de la Liga Profesional, logrando así el primer título oficial en la historia del club y de toda la ciudad.
Aquel viernes por la noche, en un estadio vacío debido a las restricciones por la pandemia de COVID-19, los goles de Rodrigo Aliendro, Christian Bernardi y Alexis Castro hicieron vibrar a toda una provincia, aunque fuera desde sus casas. El dominio de Colón fue absoluto, tanto en el juego como en el resultado, en un equipo que supo combinar solidez, carácter y jerarquía.
Lo que no pudo vivirse en la cancha, se vivió en las calles. Santa Fe se tiñó de rojo y negro durante tres días de festejos ininterrumpidos. Hubo caravanas, fuegos artificiales, banderas, abrazos y lágrimas. Una ciudad entera celebrando algo que parecía tan lejano, tan soñado, pero que se volvió realidad.
Ese campeonato no solo rompió una larga espera de generaciones, sino que también unió a los sabaleros como nunca antes. El 4 de junio ya no es una fecha más en el calendario: es el día en que Colón dejó de soñar para empezar a recordar.
