Sin lugar a dudas, Santa Fe está dejando en evidencia que es una ciudad bien cervecera. A la presencia de una fábrica de cerveza como es Cervecería Santa Fe, ahora se le suma una serie de bares para poder disfrutar de unas ricas cervezas artesanales.
En 1912, se realizaron los obras para la construcción de las instalaciones, hoy entre calle Calchines y Avenida Álem. A partir del 19 de diciembre de ese año, se produjo cerveza bajo el mando del Maestro Cervecero Otto Schneider. Productos que hoy en día se distribuyen a todo el país. La composición de la planta de personal era muy variada, pero destacaron durante mucho tiempo los obreros alemanes, polacos, checoslovacos, franceses e italianos.
Pero a esta gran fábrica, que tiene su propio patio cervecero y un circuito de paseo y visita por las instalaciones, se le suma la nueva moda: las cervecerías artesanales.
Muchos grupos de amigos, que fabricaban su propia cerveza decidieron transformarlo en un negocio, y apostaron a poner sus propios bares. Otros decidieron crear lugares donde ofrecen una gran variedad de artesanales e importadas.
Hoy en día, Santa Fe posee una amplia variedad de propuestas a la hora de querer disfrutar una rica cerveza. Agosto dentro del Mercado Progreso, Palo y Hueso en la Estación Belgrano, Okcidenta -tiene su fábrica en barrio Barranquitas- en su propio bar sobre Bulevar Gálvez, son las que fabrican su propia cerveza. Por otro lado, hay una serie de bares que venden estas marcas, y otras más industrializadas.
Mirá este mapa con los lugares en Santa Fe en donde podés disfrutar de una “fresca” en los días cálidos que se avecinan.
