El presente de Colón es cada vez más preocupante. Tras la derrota del domingo ante Defensores de Belgrano, que significó la quinta caída consecutiva, el equipo quedó afuera de la zona de reducido por el ascenso y con apenas seis puntos de diferencia respecto al último que desciende.
En este marco, el malestar de los hinchas no tardó en hacerse notar. Este martes por la noche, en las inmediaciones de la sede del club, aparecieron banderas con fuertes mensajes dirigidos a los dirigentes y al plantel profesional. “Le fallaron al socio”, y “les queda grande Colón”, fueron algunas de las frases que se pudieron leer y que reflejan el desencanto generalizado.
El clima institucional es tenso. Los resultados no acompañan, los cambios de entrenador no surtieron efecto y el equipo parece estar lejos del protagonismo que se esperaba para esta temporada en la Primera Nacional. Mientras tanto, la gente, que sigue acompañando en cada fecha, empieza a perder la paciencia.
La presión crece en todos los sectores del club. Colón necesita una reacción urgente, tanto adentro como afuera de la cancha, para encauzar el rumbo antes de que la situación se torne irreversible.
